Tandas en Albacete (Segunda Parte)

Si, primerazo, sin duda, porque en esta vida, hay que ser un poco macarra...

Sabiendo lo que venía detrás mío, y por la experiencia, no dudé en apartarme para que pasasen todos, y poder empezar a explorar el circuito a mis anchas y sin preocuparme del retrovisor.

La primera vuelta fue tranquila, "Bien, todo parecido al rFactor, si, el color del prado se parece si". Las primeras enlazadas poco o nada, tenían que ver, la siguiente a derechas de segunda y la curva de entrada a la recta de atrás, si se parecían, la curva rápida a izquierdas, si, iba para la izquierda, pero nada que ver con la forma de trazarla.
El resto del circuito, si se parecía, pero el recuerdo virtual me obsequiaba con algo más de desnivel, la chicane, era clavada, los pianos parecían tomarse exactamente igual y la curva de salida a la recta principal la recordaba más cerrada.

Primera vuelta completada, es hora de empezar a pisarle un poquito...

(Es de sentido común dejarles pasar)

El circuito no es dificil de memorizar, para nada, lo complicado y lo bonito, es saber donde puedes ir limando la conducción, sin nadie al lado para que te corrija es complicado saber si lo estás haciendo bien o mal, aunque, desde mi punto de vista, las trazadas las haces de manera natural.

Empecé a coger el ritmo, el coche respondía muy bien, los neumáticos no rechistaban, los frenos aguantaban dos o tres vueltas sin protestar....

Un punto que empecé a conocer de mi coche, fue la dirección, quizás demasiado asistida,  me filtraba demasiadas cosas, sentía cuando el coche se iba y cuando necesitaba mas o menos volante, pero ahora la veo demasiado blanda, un poco de dureza no le vendría mal.

Yo, en mi mundo, cuando algo empieza a atronar tras de mi, "¿Qué redios es eso?" una cosa roja, que sonaba a BMW, está saliendo a la recta principal, "Bien, estoy llegando a la frenada, después de la curva me aparto" Miro por el retrovisor y ya está detrás de mi, me aparto y voy frenando, vaya sonido, estruendo, mejor dicho, se podría decir que daba hasta miedo, veo hasta como salen chispas del enorme difusor.

(Es tan feo que resulta acojonante)

Los descansos se hacían cortos, pero cada tanda iba pesando un poco más, hasta que en un descanso tras la comida, llegué a dormirme dentro del coche. Grandiosa comida, por cierto, con un sencillo bocadillo y una cocacola, oyendo las experiencias y comentarios de los más experimentados. Abro oídos y aprendo lo que pueda.

(Entre tanda y tanda)

Pero para aprender en practicas, nada mejor que sentarme a la derecha de Pak con su S2000, la frase de "La transición de estar acelerando a fondo a frenar a fondo tiene que hacerse en el menor tiempo posible". Vale, bien, lo veo lógico, primera frenada a fondo y me quedo cual mosquito en el parabrisas, "Ah, se refería a eso".

Ya tenía una ligera idea de lo que era un S2000, pero otra cosa es verlo en manos de su dueño y otra cosa es disfrutar de una conducción de ese nivel. Ni una duda, correcciones perfectas en el momento, apurando frenadas muy serias. Eso es conocer tu coche, de hecho me entraba la risa como cuando era pequeño y mi padre me llevaba "De tramo" con el Alfa 75.
Hacer 1:56 con un S2000 de calle con sólo unas pastillas DS2500 y unos Potenza RE 050 A, es para no dejar de alabar su conducción y así fue hecho por todos.

Lástima de un amago de Toretto, con otro S2000 no perteneciente al Club, que nos amargó un par de vueltas...

En la tanda siguiente, él se montó conmigo, para hacer "improves" en mi conducción, insistió en "la transición y observó que mi trazada era correcta. Lamentablemente, esta vez sólo pudimos dar tres vueltas, porque alguien se había salido de pista. Pero que me quedé con la copla y en la siguiente, salí a por todas.

(Precioso E36 y buen espíritu el del Galant)

Me daba muy buena espina esa tanda, y aunque los frenos me estaban pidiendo el cambio, salí con mucha confianza, que se me recompensó con una buena cantidad de vueltas sin tráfico, ni gente que me acuchillaba, ni gente enfriando, así que puse en practica lo aprendido.

Castigaba mucho más los frenos, y probé a no frenar en dos o tres puntos del trazado, pues por la escasez de potencia no llegaba a una velocidad excesiva como para preocuparme, me comía más los pianos y intentaba modular con el acelerador a la salida de las curvas, para no perder tracción, girar menos la dirección para no provocar tanto subviraje. Del pie izquierdo ni me acordé.

Pero vuelta tras vuelta, estando casi sólo, curva a curva, no dejaba respirar el coche, iba cada vez más rápido, no había nadie que me lo dijese, lo sabía, sabía donde podía apurar mas.
Llegué a seguir durante una vuelta a un Skoda Octavia RS, el 2.0 TFSi, de 200cvs, para algunos les parecerá algo discreto, pero para mi coche y para mi, fue toda una proeza.

En la vuelta de enfriamiento que casualmente fue la última, notaba crujidos por todo el coche, como la dirección vibraba al frenar y tenía que pisar el chasis del coche para hacer una frenada normal, pero la sudada, la gran sonrisa y la enorme satisfacción de haber hecho las cosas bien, que tenía debajo del casco, no me la quitaba nadie.

Del 2:26 que hice en la primera tanda, al 2:13 de las últimas vueltas, hay un mundo de mejora, de sensaciones, de "UUUUFFF's", risas, pianos, mucho subviraje, un sobreviraje con su contravolante mal hecho, de todo y de todos se aprende.

La sensación de libertad del Ring, estuvo presente, y es que a poca gente (la cuentas con los dedos de una mano y te sobran dos o tres) les puedes explicar esa sensación, esa felicidad, que no sabes si reír o llorar.

Llámenme Rookie, pero quiero más...